jueves, 31 de octubre de 2019

Cita: Flexibilidad mental

Cita a ciegas:

« La flexibilidad mental es mucho más que una habilidad o una competencia: es una  virtud  que  define  un  estilo  de  vida  y  permite  a  las  personas  adaptarse mejor a las presiones del medio. Una mente abierta tiene más probabilidades de generar cambios constructivos que redunden en una mejor calidad de vida y en la capacidad de afrontar situaciones difíciles. Una mentalidad rígida no sólo  es  más  propensa  a  sufrir  todo  tipo  de  trastornos psicológicos  y emocionales, sino que además afectará negativamente al entorno en el que se mueve (por ejemplo, laboral, familiar). ¿Quién no ha sido víctima alguna vez de la estupidez recalcitrante de alguien que por su rigidez mental no es capaz de cambiar de opinión o intenta imponer sus puntos de vista? 
No hay que ir demasiado lejos: en cada familia, en nuestro lugar de trabajo, en la Universidad, en el colegio, en el barrio o en el edificio donde vives, siempre habrá  alguien  intolerante  y  dogmático  que  trata de  sentar  cátedra  e  influir sobre aquello que piensas o haces. Insisto: las mentes cerradas, además de ser un problema para sí mismas, también lo son para la sociedad en la que viven,  pues impiden  el  progreso  y  permanecen  ancladas  en  un  pasado que quieren perpetuar a cualquier precio.»

Walter Riso - El arte de ser flexible-.




miércoles, 30 de octubre de 2019

La jaula de la obediencia

« Ninguna acción posee por si misma una calidad sicológica inmutable. Su significado puede ser alterado colocándolo en contextos diferentes. »



Fuente: Stanley Milgram,  Obediencia a la autoridad, 1973.


" La obediencia es el mecanismo psicológico que hace de eslabón entre la acción del individuo y el fin político. Es la argamasa que vincula los hombres a los sistemas de autoridad. Tanto hechos de la historia más reciente como la experiencia de la vida de cada día nos hacen pensar que para no pocas personas la obediencia puede ser una tendencia de comportamiento profundamente enraizada, más aún, un impulso poderosísimo que pasa por encima de la educación ética, de la simpatía y de la conducta moral

" Los filósofos conservadores arguyen diciendo que la construcción misma de la sociedad se ve amenazada por la desobediencia, y que incluso cuando una acción prescrita por la autoridad es injusta, es mejor cumplirla que hacer tambalear las bases de la autoridad. Hobbes afirmaba ulteriormente que semejante acción no puede atribuirse en manera alguna a la persona que la ejecuta, sino únicamente a la autoridad que la ordena. Mas los humanistas razonan en favor de la primacía de la conciencia individual en semejantes materias, insistiendo en que, cuando se hallan en conflicto el juicio moral del individuo y la autoridad, ha de pasar aquél por encima de ésta.

" Es muy fácil condenar las acciones de sujetos obedientes, cuando está uno sentado cómodamente en un sillón. Ahora bien, quienes condenan a dichos sujetos los miden conforme al patrón de su propia capacidad de formulación de principios altamente morales. Y este patrón nada de justo tiene. No pocos sujetos, cuando se trata de exponer una opinión, se sienten tan capaces como cualquiera de nosotros en punto a la exigencia moral de negarse a realizar acción alguna contra una víctima indefensa. También ellos saben, en general, qué es lo que habría de hacerse y pueden muy bien exponer sus valores cuando se presenta la ocasión. Pero muy poco tiene todo esto que ver con su comportamiento factual bajo el peso de las circunstancias.

" Si pedimos a alguien que ofrezca un juicio moral sobre lo que constituye el comportamiento más apropiado en semejante situación, verá sin género alguno de duda la desobediencia como la conducta más idónea. Ahora bien, no son los valores las únicas fuerzas que actúan en una situación concreta que está teniendo lugar. No son más que una muy estrecha lista de causas dentro del espectro total de fuerzas que influyen sobre una persona.

" La fuerza ejercida por el sentido moral del individuo es menos efectiva de lo que nos haya podido hacer creer el mito social. Aun cuando es verdad que preceptos como el «No matarás» ocupan un puesto preeminente en el orden moral, no ocupan, no obstante, una posición correspondientemente fuerte dentro de la estructura síquica humana. Bastan unos pocos cambios en las rúbricas de un periódico, una llamada desde el Consejo del destacamento, órdenes que emanan de una persona con charreteras, y ahí tenemos a uno que va a ser conducido a matar con mucha menor dificultad. Incluso las fuerzas que examinamos en un experimento psicológico llegarán muy adelante en su liberar al individuo de los controles morales. Los factores morales pueden ser dejados de lado con una relativa facilidad por una calculada reestructuración del campo social e informativo.

" La desaparición de todo sentido de responsabilidad es la consecuencia de más largo alcance de la sumisión a la autoridad.

" Aun cuando una persona que actúa bajo una autoridad realice acciones que parecen estar en contradicción con las normas generales de la conciencia, sería falso afirmar que pierda su sentido moral. Muy al contrario, adquiere más bien un punto de concentración totalmente diferente. No responde con un sentimiento moral a las acciones que lleva a cabo. Su preocupación moral se desplaza ahora, más bien a la consideración de lo bueno que es vivir conforme a las expectativas que la autoridad se ha forjado respecto de uno mismo. En tiempos de guerra no se pregunta un soldado si es bueno o malo el bombardear una aldehuela: siente más bien orgullo o vergüenza, según la medida de cómo ha llevado a cabo la misión que le ha sido asignada. Otra de las fuerzas sicológicas que actúan en esta situación puede ser designada como «antiantropoformismo». A lo largo de décadas han estudiado los sicólogos la tendencia primitiva que se da entre los hombres de atribuir a objetos o fuerzas inanimadas las cualidades de la especie humana. Una tendencia diametralmente opuesta a la misma, es la de atribuir una cualidad impersonal a fuerzas que son, tanto en su origen como en su ulterior subsistencia, esencialmente humanas. Algunas personas consideran a los sistemas de origen humano cual si existieran por encima y más allá de toda causa humana, más allá de todo control del antojo o del sentimiento humano. 

"Ninguna acción posee por si misma una calidad psicológica inmutable. Su significado puede ser alterado colocándolo en contextos diferentes. 

" Finalmente, nos encontramos con una característica esencial propia de la situación alemana, que no hemos estudiado aquí, es decir, la pérdida grande de valor por parte de la víctima, ya con anterioridad a la acción que contra la misma se realiza....  Una devaluación sistemática de la víctima nos otorga una medida de justificación psicológica del tratamiento brutal de la víctima, y ha constituido siempre el acompañamiento de matanzas, «pogroms», y guerras. 

"... es psicológicamente fácil descargar de uno mismo la responsabilidad cuando no pasa de ser un eslabón intermedio dentro de la cadena de una acción perversa, hallándose alejado de las últimas consecuencias de la acción. El mismo Eichmann se sentía enfermo cuando visitaba los campos de concentración, pero, para participar en un asesinato en masa, no tenía más que sentarse frente a su mesa de trabajo y barajar documentos. Al mismo tiempo el hombre que en el campo de concentración soltaba Cyclon-B en las cámaras de gas podía muy bien justificar su conducta basándose en que a fin de cuentas él no hacía más que seguir órdenes de arriba.

" Nos encontramos de esta manera con una fragmentación del acto humano en su totalidad; no hay persona alguna que decida llevar a cabo un acto malo y ninguna por consiguiente se ve confrontada con sus consecuencias. La persona que asume una responsabilidad total por su acción se ha diluido, simplemente. Es ésta posiblemente la característica más común de un mal socialmente organizado en la sociedad moderna.

" Una persona no consigue abarcar la situación en su totalidad, sino únicamente una pequeña parcela de la misma, y de esta manera es incapaz de actuar sin alguna forma de dirección totalizante. Cede ante la autoridad y al obrar de esta manera queda alienada de sus propias acciones.

" George Orwell captó muy bien la esencia de esta situación cuando escribía:

" En el momento en que escribo estas líneas, seres humanos altamente civilizados vuelan sobre mi cabeza tratando de matarme. No tienen sentimiento alguno de enemistad contra mi como individuo, ni tampoco lo tengo yo contra ellos. Como se dice, no hacen otra cosa que «cumplir con su deber». La mayor parte de ellos, estoy yo plenamente convencido, son personas de buenos sentimientos, cumplidoras de la ley, que jamás soñarían en sus vidas privadas con cometer un asesinato. Por otra parte, si consigue uno de ellos hacerme saltar en pedazos con una bomba bien colocada, no por ello dejará de dormir tranquilamente."

selección M.T.M.

jueves, 17 de octubre de 2019

Trampas de la inteligencia

« creo que es importante que pensemos en otras herramientas cognitivas como el pensamiento crítico, la resistencia a los sesgos, la conciencia emocional… Sabemos que este tipo de cosas pueden ser enseñadas y sería fantástico si se introdujeran en los planes de estudio y en las empresas. Se trata de fomentar la sabiduría y no tanto la inteligencia. Dadas las numerosas consecuencias de la trampa de inteligencia, desde errores de los médicos hasta errores judiciales o la polarización política, esto podría traer cambios enormemente positivos en el mundo en el que vivimos »


Fuente:  Entrevista a David Robson.


Tradicionalmente, científicos y educadores han tendido a confiar en medidas de razonamiento abstracto y medidas de velocidad de procesamiento mental para determinar si alguien es inteligente. Este tipo de textos se centran en cosas como los modelos de reconocimiento y el razonamiento espacial asumiendo que eso representa un tipo de inteligencia general o un tipo de capacidad cerebral que ayuda a solucionar todo tipo de problemas. Esa es la base del Cociente Intelectual (CI) y muchas escuelas, universidades y empresas los siguen utilizando todavía hoy.
La mayoría de las personas desconocen su CI, pero como la mayoría de los logros académicos aún dependen de ese tipo de habilidades de razonamiento abstracto, todavía tendemos a tomar el logro académico como un signo de inteligencia.

No niego que esas habilidades sean importantes, pero las investigaciones demuestran que no son suficientes para que dejes de hacer cosas estúpidas o tener creencias absurdas. Es un poco como un coche donde la inteligencia abstracta es el motor: cuanto más potencia le das al motor, más rápido vas. Pero también necesitas una buena dirección, frenos y GPS para asegurarte de que llegas a tu destino.

" No creo que debamos abandonar las definiciones actuales de inteligencia y el razonamiento abstracto medido por los test. Pero como sociedad necesitamos apreciar y valorar otros rasgos que puedan protegernos de las trampas de la inteligencia –la curiosidad, la autorreflexión, la mente abierta–. Para mí son esas cualidades las que distinguen a un gran pensador de alguien meramente inteligente.

" Las investigaciones muestran que te puedes vacunar contra los sesgos y las falacias de la misma manera que te vacunas contra los virus. Esto tiene que ver con el aprendizaje de varios errores de pensamiento que cometemos...  casi todo el mundo puede evitarlos en mayor o menor medida, pero es un problema mayor para los que se enorgullecen de sus juicios impulsivos.

" Yo soy adicto a Twitter, así que no soy la mejor persona para dar un consejo así, pero si soy honesto, creo que las redes sociales no son nuestro mejor nutriente intelectual. Parece claro que las redes alientan la superficialidad y el pensamiento impulsivo. Las redes sociales son comida basura para nuestras mentes. No están mal en pequeñas cantidades, pero no deberían formar parte de toda nuestra dieta. 

"... la gente inteligente puede ser “disracional”. Es decir, tienen la capacidad para pensar de forma crítica, pero no utilizan esta herramienta y se dejan llevar por lo intuitivo, por si algo les parece correcto o no. Hay estudios que señalan que el pensamiento crítico realmente no mejora a través de los estudios superiores. Es decir, no estamos enseñando algo que debería ser básico en las universidades. Y deberíamos hacerlo. El pensamiento crítico incluye cuestiones como examinar cuáles son las fuentes de una noticia, y si son rigurosas y creíbles; identificar la información soterrada y discernir si es verdad o no, y generar otras posibles explicaciones, además de constatar las contradicciones.

" los psicólogos ahora se centran mucho en temas como la racionalidad, la susceptibilidad hacia los sesgos, el pensamiento crítico y el razonamiento sabio, que tiene que ver con la humildad intelectual y la capacidad de considerar otras perspectivas. Este tipo de cosas no se miden con los tests del CI, pero son mejores para predecir todo tipo de medidas de bienestar.

" Las emociones puede ser realmente una fuente de información. El problema es que nuestras emociones son bastante confusas y pueden estar influenciadas por muchos factores diferentes...

" Las estrategias para lograr una distancia emocional, como por ejemplo hablar de ti mismo en tercera persona, no adormecen tus sentimientos por completo, pero te permiten lograr ese punto de vista más separado de lo sucedido. Así se puede ser más analítico y se puede entender qué te ha llevado a sentirte de esa manera. Esto es importante cuando te sientes tan enfadado que actúas de forma precipitada. Es mejor preguntarse a uno mismo si es tan malo como parece y, si es así, cuál es la mejor manera de solventar esa crisis.

" Esto también te ayuda para ser una persona menos polarizada en cuanto a asuntos políticos, dado que muchas de nuestras opiniones surgen de lealtades tribales a partidos particulares, y a menudo nos sentimos muy amenazados por opiniones que no están de acuerdo con nosotros. Reconocer estas emociones y tomar distancia de ellas ayudan a evitar una respuesta instintiva y a respetar los hechos tal y como son.

" Como nuestras emociones, las intuiciones a menudo son fuentes de información, particularmente si nos ayudan a focalizar nuestra atención. Esto les ocurre mucho a expertos como los médicos, que a menudo hacen diagnósticos en apenas unos minutos. El problema es que esas intuiciones pueden fallar y estar influenciadas por información irrelevante, sesgos cognitivos… Por tanto, confiar únicamente en las intuiciones es ser disracional, ya que deja abiertas muchas puertas a los errores. Esta es una de las razones por las cuales el 10-15% de los diagnósticos iniciales de los médicos son erróneos.

" Realmente no hay una oposición entre lo emocional y lo racional. Si eres una persona reflexiva puedes ser muy emocional e intuitiva y a la vez muy racional. La clave es escuchar tus emociones e intuiciones, pero no ser gobernado por ellas. Ese es el secreto para tomar buenas decisiones."

selección M.T.M.







Experiencia óptima

" Cuando realizamos una acción en un terreno que dominamos bien, sea actividad artística, artesana, deporte, hobby o bricolage, jueg...